Empresas permiten llevar el perro al trabajo

Ya no es una alternativa exclusiva de Sillicon Valley: en EEUU, 1,4 millones empleados llevan a sus mascotas al trabajo. Argumentan al hacer felices a sus dueños, mejora la productividad.

 

 

Al igual que todos quienes se mudan a una oficina nueva, Dolly necesitó de algún tiempo para adaptarse. Ella es uno de los millones de perros que acompañan cada día a sus amos a oficinas y sitios de trabajo receptivos a la idea de la presencia canina. La parte más difícil fue aprender a no ladrarle al cartero. «Lo veo como una prestación, como el cuidado de la salud. Tiene un atractivo enorme», comentó la dueña de Dolly, Erin McCormack, quien trabaja en Authentic Entertainment en Los Ángeles, como productora del programa Auction Kings, de Discovery Channel.

 

Cerca de 1,4 millones de dueños llevan al trabajo a unos 2,3 millones de perros todos los días en los Estados Unidos, según una encuesta de la American Pet Products Association (Asociación Estadounidense de Productos para Mascotas) del año pasado.

 

La vez anterior que el grupo hizo su encuesta, en 2006, una de cada cinco empresas eran receptivas a la idea de tener perros al lado. Ese número probablemente se mantuvo estable si se incluyen los negocios de una sola persona, dueños de mascotas que tienen su oficinas en casa y tiendas al por menor, explicó Len Kain, cofundador y editor del sitio Dog Friendly, que lista las empresas amigables con los perros en cada estado.

 

Algunas de las corporaciones más grandes de los Estados Unidos aceptan la compañía de las mascotas de sus empleados, como Google y Amazon. Una de las principales razones que mencionan los patrones es que quieren tener felices a sus trabajadores.

 

«A menudo las empresas de ingeniería y software son el tipo de las que aceptan mascotas», dijo Kain. «Estas empresas encaran problemas para hallar empleados con las habilidades que necesitan y no quieren perder a estos trabajadores», agregó.

 

 

De la prueba a la práctica


Extrovertic, una agencia de publicidad enfocada en el cuidado de la salud, tiene oficinas en Nueva York y Cambridge, Massachusetts, con un total de 40 empleados. Hizo la prueba hace un año, durante la pasada celebración del Día Lleve su Perro al Trabajo. El evento, que este año cae el 22 de junio, es promovido por la organización Pet Sitters International, con oficinas en Carolina del Norte, que promueve la adopción de mascotas.

 

El experimento fue tan exitoso que la compañía decidió abrir sus oficinas permanentemente a los perros. Sally, una perra beagle de rescate de 5 años, del director de cuentas Jared Shechtman, fue elegida para aparecer en el cartel del Día Lleve su Perro al Trabajo.

 

«Somos una agencia pequeña. Queremos ser diferentes. Queremos que la calidad de vida de nuestros empleados sea mejor de la que obtendrían en una agencia más grande. Tener perros en la oficina es otra manera de decir: ‘Somos diferentes y nos preocupamos por ti»’, dijo la directora general de la agencia, Dorothy Wetzel.

 

En Authentic Entertainment, entre 15 y 20 de sus 120 empleados o trabajadores independientes traen sus perros al trabajo, dijo la cofundadora y productora ejecutiva Lauren Lexton. Cuando fundaron la compañía hace 11 años, Lexton y Tom Rogan decidieron dejar que sus empleados trajeran a sus perros porque «siempre se sentía bien», recordó. «Los perros son un elemento que hace más suave el trabajo diario. Hay algo que, al tenerlos alrededor, hace feliz a la gente», agregó.

 

Asimismo, explicó que tiene a un buen equipo y quiere mantenerlo para siempre. Dijo que si una persona tiene un perro que ya está acostumbrado a acompañarla a trabajar, es menos probable que acepte una oferta de trabajo mejor, si llegara a ocurrir.

 

Tener la compañía de animales también fomenta la camaradería, resaltó, de su lado, McCormack. «Los perros automáticamente rompen las barreras. Son arrancadores automáticos de conversación y rompen el hielo», añadió.

 

No todas las empresas pueden darse el lujo de permitir perros, aclaró Kain, quien creó DogFriendly con su esposa Tara hace 15 años en Anchor Point, Alaska. Es posible que haya empresas establecidas en edificios donde se prohíben los perros. También puede haber ordenanzas locales que impidan la presencia de mascotas en negocios como tiendas de alimentos, restaurantes, salones de belleza (en algunos estados) y oficinas médicas. El tema de los seguros puede ser otra barrera.

 

Para aquellos negocios que no tienen problemas, permitir la presencia de mascotas puede ser una manera de tener menos empleados, pero que puedan trabajar más horas. «Al permitir perros en el trabajo, un empleado no tiene que irse para cuidar a su mascota», dijo Kain.

 

En Authentic Entertainment, el obstáculo más grande para Dolly eran los repartidores que llegaban a la oficina. «Ella siempre le tuvo miedo a los carritos, a las cajas y a la gente uniformada», dijo McCormack.

 

Ella le presentó a Dolly al hombre encargado del mantenimiento en Authentic Entertainment, pero Dolly siguió ladrando y gruñendo con cada repartidor externo, así que McCormack pidió que los encargados de la recepción le llamaran por teléfono antes de la llegada de ellos.

 

Ahora ella pone a Dolly en su regazo hasta que pasan las entregas. Problema resuelto.

Fuente: AP